‘El reencuentro’ de Motauros
La concentración motera regresa a Tordesillas del 20 al 23 de enero con su XXII Edición
Los moteros comienzan a desempolvar sus cazadoras de cuero y a sacar brillo a sus cascos. Los pañuelos rojos y negros vuelven a anudarse a sus muñecas y cabezas, y las gafas de sol ya reflejan los rayos de esperanza hacia la nueva normalidad. Todo listo para que el olor a goma y el rugir de los motores se apodere de Tordesillas con el regreso de los Motauros a sus calles, en una concentración que cumple ya más de veinte años.
El retorno, muy deseado por los amantes de las motos y que se espera «con la misma ilusión que el primer día», como afirma el presidente de Motauros, Juan Carlos Ruiz, tendrá lugar los días 20, 21, 22 y 23 de enero. Una cita que en su XXII Edición llevará el lema de ‘El reencuentro’, como guiño a esos años en los que las motos y los moteros han esperado para volver a verse y rodar juntos por las calles del municipio vallisoletano.
La concentración del milenio
Más corazón que sabiduría. Motauros nace en el año del milenio, y con el nuevo siglo y las esperanzas puestas en el futuro, los organizadores de esta concentración decidieron poner en marcha un proyecto tan bonito como ambicioso. Contando con el apoyo del ayuntamiento de Tordesillas, «que fue el que nos animó a poner la idea en marcha y seguir adelante», organizaron aquella primera edición «con más corazón que sabiduría», pero «con mucha ilusión».
Juan Carlos Explica que, a la hora de crear el programa para el primer encuentro, se basaron en aquellas cosas que les gustaban de otras concentraciones, pero que también quisieron darle un toque más personal, por lo que incorporaron innovaciones que no se habían visto antes en eventos de este estilo. «Fuimos pioneros en incluir en la programación los espectáculos musicales», anuncia Ruiz, quien puntualiza que antes las concentraciones de motos sólo contaban con la acampada en el pinar y alguna ruta grupal.
«Al principio fue difícil, porque contábamos con poca gente y con pocos medios», señala el presidente de la asociación al hacer memoria, pero con alegría puntualiza que «a pesar de las trabas del comienzo» han conseguido crear, año a año, una gran familia alrededor de una misma pasión. «Está claro que siempre se tiene algún fallo cuando organizas un evento de este calibre, pero lo importante es aprender de los errores y trabajar para mejorarlos».
En los 22 años de rodaje, Motauros se ha convertido en la tercera concentración de invierno más importante de toda España algo que, en palabras de su presidente, «es un sueño». «Es curioso lo rápido que han pasado los años y que hayamos llegado tan lejos con las mismas ganas que en la primera edición». Con pesar, recuerda que en este tiempo no todo han sido buenos momentos, ya que han perdido a socios muy queridos, como el primer presidente, pero que el continuar con el proyecto que iniciaron entre todos, así como dedicarles algunas de las ediciones, «es una forma de que sigan con nosotros».
Además, Ruiz advierte que uno de los cambios más notables en estos años ha sido el número de asistentes, que han llegado hasta las cinco cifras en las últimas ediciones. «Una cantidad que esperamos volver a alcanzar». De hecho, Juan Carlos explica cómo, los primeros diez días tras el anuncio del regreso de la concentración, las ventas de inscripciones se dispararon, «fue una avalancha que superó con creces a los años anteriores».
Motauros XXII
‘El reencuentro’ contará con un programa muy similar al de años anterior, siendo los platos fuertes de la concentración las actuaciones musicales de grupos como Cañoneros, Porretas, Söber y el espectáculo Renovation Experience de la mano del DJ Ricky Galende, entre otros.
Asimismo, a la música también se le suma la ruta a Zamora, Motauros solidarios –una ventana para dar visibilidad a aquellas asociaciones con fines solidarios-, que este año busca dar apoyo a la investigación del cáncer infantil con la campaña #yoinytu, o el bike show.
El presidente de la asociación invita a todo aquel al que le apasionen las motos y el ambiente motero a acercarse hasta Tordesillas y a pasárselo bien en una concentración en la que «las risas están aseguradas». Ruiz asegura que esta edición les ofrece la oportunidad de reencontrarse con grandes amigos «que llevamos mucho tiempo sin ver».
La cita volverá a congregar a amantes de los corceles de dos ruedas. A aquellos que sienten las motos como una forma de vida y como una oportunidad para crear una familia y que, como manifiesta Juan Carlos, «la vida sigue, y hay que mirar hacia delante con una sonrisa y disfrutar de los amigos con responsabilidad».