El espíritu navideño colma la cultura y el ocio medinense
Las cabalgatas de Papá Noel y de los Reyes Magos comparten cartel un año más junto con la carrera San Silvestre y la Marcha del Cochinillo, a las que se suma la única pista de hielo natural fuera de Valladolid
El Árbol de la Esperanza está iluminado, llenando de luz y deseos el patio del pozo del Ayuntamiento de Medina; en lo alto de las calles el alumbrado pende de fuertes engranajes; y en la plaza Mayor el IX Mercado Navideño se atesta del ir y venir de autóctonos y foráneos que pasean entre los puestos en busca de regalos, detalles o simples recuerdos. Una a una las piezas van encajando en el motor del espíritu navideño, que arranca en estos días con fuerza colmando de ocio, cultura y deporte las ‘Navidades Blancas’ de la Villa de las Ferias.
En estas fechas la programación es tan variada que todas las edades están cubiertas, de tal forma que, en el mes en el que la ilusión es la tónica principal de cada evento, los deseos de los habitantes de la localidad y de todos aquellos visitantes que quieran acercarse al municipio se hagan realidad.
Para los amantes de las exposiciones la oferta es muy diversa, pues tienen la oportunidad de disfrutar de las tradicionales muestras de belenes –tanto el municipal como el de la Asociación de vecinos-, que pueden verse en el Patio de Columnas del Consistorio y en las Reales Carnicerías, respectivamente, hasta el Árbol de la Esperanza (Patio del Pozo), pasando por la novena edición de la exhibición de Motos Vespas y Lambretas, ubicada junto al árbol; la exposición Filatélica –asentada en el Hospital Simón Ruiz- y la de Mercados de Navidad del siglo XIX en el Museo de las Ferias.
Un abanico de posibilidades que puede completarse con el paseo por la plaza Mayor del municipio, que hasta el día de Reyes se transforma en aquello por lo que un día fue famosa Medina; sus ferias. Pero en esta ocasión las transacciones no versan sobre el trigo y el ganado lanar, sino sobre los puestos de pequeños comerciantes en los que los transeúntes pueden adquirir figuras para el belén, artículos de broma para animar las cenas y comidas de la época, bisutería, productos de cuero y hasta dulces navideños.
Junto a este mercado, que cumple nueve años ocupando el espacio de la plaza más grande de España, se asienta también la zona infantil, y con las vacaciones en los colegios los pequeños pueden disfrutar del tiempo fuera de casa con atracciones como el Dragón-tren Medieval, camas elásticas, la barredora y la rampa deslizadora entre otras, liberando energía mientras los padres disfrutan del mercado o de un chocolate con churros. Y en el caso de los más jóvenes o si la familia al completo quiere pasar una tarde divertida, en la Explanada del Cuartel pueden sentir la adrenalina de la conducción a través de la autopista de karting y los coches de choque.
Pero lo que distingue a las ‘Navidades Blancas’ de Medina de las del resto de la provincia es la tradicional pista de hielo; un elemento de 30 por 15 metros que estará instalada en el ágora de la localidad y que es la única en la provincia fuera de Valladolid. Además, a diferencia de la de la capital, este escenario helado tiene la particularidad de ser de hielo natural, una característica que la hace aún más atractiva y única para los medinenses y para los valientes que se atrevan a patinar sobre su resbaladizo suelo.
Muérdago deportivo
Como en cada edición, las citas deportivas son ya casi tan tradicionales como las cabalgatas y los adornos navideños. Por ello, junto con el cross escolar y los torneos de baloncesto, bádminton, multideporte o fútbol, las actividades más multitudinarias son, un año más, la Marcha Ciclista Popular del Cochinillo, celebrada en la mañana de Noche Buena, y la XXIII Carrera Popular San Silvestre Medinense, en la tarde de Noche Vieja. Ambas con salida y llegada en la plaza Mayor, reúnen a alrededor de 800 personas que se calzan las deportivas incluso en días tan señalados.
Pero si algo es propio de la navidad son las cabalgatas, dos espectáculos visuales que hacen que la mirada de los niños batalle con la iluminación de las farolas mientras esperan a ver a Papá Noel y a los Reyes Magos y a entregarles sus cartas para que cuando comiencen a trabajar, en sus respectivas noches, no olviden el más mínimo detalle. Así, tras su previa recepción, Noel recorrerá las calles el día 23 a partir de las 18.00 horas, y sus majestades lo harán, a la misma hora, pero el día 5 de enero.
Y con los últimos coletazos del adviento también tendrán lugar los pases del Belén Viviente, que se desarrollarán los días 3, 4 y 5 de enero –los dos primeros de 17 a 20 horas y el último durante todo el día-, en la plaza Mayor de la Hispanidad. En esta singular representación los viandantes podrán ser testigos de todo lo ocurrido en aquella pequeña localidad hace ya tantos años y, el día 5, ver como los Reyes Magos desembarcan en este punto y presentan sus regalos ante el recién nacido.
Melodías invernales
Los villancicos son las canciones por excelencia en estas fechas, por lo que también tienen su espacio en la programación con el XXIX Muestra-Certamen de Villancicos para Escolanías ‘Villa de Medina del Campo’, que tiene lugar los días 19 y 21, en el Auditorio Emiliano Allende.
Sin embargo, estas características composiciones no son las únicas con cabida en Navidad, y haciendo gala del gusto ecléctico por la música del pueblo, durante los días 15, 16 y 17 se celebra el festival ‘Címbalo Folk 2022’, donde, por orden de días, actuarán los grupos La Bazanca. ‘Sones de Castilla y León’, Ruin Rapaz. ‘Ruin Rapaz nuevo folk’ y Ana Alcaide. ‘Luna Sefardita’. A excepción del primer día, que comenzará a las 20.00 horas, el resto lo harán media hora más tarde, todas ellas en el Auditorio Municipal.
La literatura, fuente de imaginación e inspiración, también tiene un hueco estos días. No sólo por las actividades que se llevan a cabo en la Biblioteca municipal, sino por las presentaciones y recitales literarios que tienen lugar. Citas que comienzan el día 9 de diciembre a las 19.00 horas con la presentación del libro de relatos navideños ‘La memoria de los crisantemos’, del escritor y coordinador de la Feria del Libro de Medina, José Ignacio García, en la capilla del Hospital Simón Ruiz, seguido de un recital en el que el autor leerá varios pasajes de la publicación acompañado del guitarrista Charlie Crespo. En este sentido, el lunes 12 se dará a conocer en el Patio del Pozo el libro ‘No pasa nada’, de Azucena Alfonso Recio, cuyos beneficios de la venta irán destinados a la Fundación Alba Pérez, que trabaja en la cura del cáncer infantil; y al día siguiente se va a llevar a cabo el recital literario musical de navidad en el que las concejalas se implicarán en esta iniciativa leyendo varios capítulos de ‘De hadas y magos’.
A la programación se suman también las actuaciones teatrales con la intervención de distintas compañías que pondrán el broche artístico a estos días con sus puestas en escena, todas ellas destinadas a cualquier tipo de público.
Para los deportistas, para los amantes de la cultura y del ocio, las ‘Navidades Blancas’ de Medina reúnen un compendio de actividades con las que no existe un segundo para la ociosidad, sino que es una convocatoria para estar entretenido mientras se comparte la diversión en familia, con amigos o nuevos conocidos y se disfruta todos juntos del espíritu que invade a la villa en estas fechas.