Antigüedad, las leyendas hechas pueblo
El municipio se encuentra envuelto en una serie de misterios relacionados con fuentes sanadoras y seres humanos que habitan el subsuelo, entre otras, que, unidos a su situación en pleno Cerrato palentino y los monumentos que allí se encuentran, lo han convertido en parada obligada para los turistas más curiosos
Si hay algo que caracteriza a esta época del año, además de los colores tostados y los mantos anaranjados que cubren el suelo a los pies de los árboles desnudos, es la llegada del olor a las humeantes chimeneas y a las primeras castañas asadas que calientan los tranquilos paseos callejeros; pero, sobre todo, la llegada del tiempo en el que las lluvias y las noches más cerradas le dan un cariz misterioso a los días, y las historias y leyendas, así como los lugares en los que se desarrollaron, se convierten en atractivo turístico para los más aventureros.
Esos enclaves –edificios, municipios y ciudades- son una de las marcas insignias de la Zona y de la Comunidad. Por ello, desde la redacción de Zona Magazine proponemos una de las rutas más misteriosas hasta el momento pues, en pleno corazón del Cerrato palentino, donde las bodegas se cuentan por centenares y a vista de pájaro el paisaje es impresionante, los mitos también envuelven una localidad que, sólo por su nombre, ya desprende intriga: Antigüedad.
Este municipio, cuyos orígenes tienen vestigios de pueblos clásicos como son los celtas, vacceos, romanos y godos, recoge la cultura de todos ellos, la magia que encerraban estas civilizaciones y sus costumbres, para hacerlas fuentes de la especial energía que desprende la villa en sí misma.
Sin embargo, antes de llegar a este punto, la primera curiosidad que rodea la localidad es que su situación cuenta con un elemento mágico, puesto que se encuentra a una distancia equidistante –de 10 kilómetros- de las poblaciones que la circundan: Cevico, Tabanera, Baltanás, Cobos o Espinosa; una característica inusual que no se repite en toda la geografía española y que hace de Antigüedad una fuente de energía que coincide con las afirmaciones que los visitantes hacen de ella; «mágica».
Pero esta coincidencia de kilometraje es sólo el principio de los enigmas que Antiquitate tiene por desvelar a los turistas que se adentran en el acervo de sus calles y bosques, y que se dejan abrazar por la fuerza que emana de puntos estratégicos como la ermita de Nuestra Señora del Garón y las de Villella y Valverde, así como en el arroyo Valderrey y las Veredas.
Galerías bajo tierra
Un halo de misterio es el que cubre este municipio palentino de cuatrocientos habitantes en el que hasta su arquitectura guarda algún que otro secreto pues, de carácter tradicional, el subsuelo de los hogares antigüedeños es considerado como uno de los interrogantes más populares entre los residentes locales.
Y es que el pópulo sostiene que entre las casas del municipio se encuentran los tres accesos a unas galerías subterráneas habitadas por seres humanos que, según dicen, descenderían de la Edad Media y tendrían conocimientos sobre avances tecnológicos, médicos y espirituales. De hecho, incluso algún convecino afirma haber intermediado entre el exterior y esos seres, ayudándolo en alguna ocasión. Y se mantiene que en una de estas salas existen dibujos y mensajes cifrados que se han ido desvelando poco a poco y que, aunque aún no se sabe su significado, la especulación ha volado hasta el punto de hablar de puertas dimensionales, máquinas con tecnología avanzada e incluso un ser con espíritu propio.
En este punto la realidad y la leyenda se fusionan y las diferentes teorías de los vecinos se mezclan, pero la posibilidad de que esto sea real y de poder descubrir dónde están esos accesos ya es una aventura por sí sola. Y, si se escucha atentamente el viento, se puede percibir una especie de música que en el susurro de las tardes parece como si una coral lanzara al viento sus voces desde las entrañas de la tierra; una melodía extraña y sin explicación lógica que se une a las incógnitas de Antigüedad.
A este conjunto de elementos se suma la teoría de la existencia de una fuente de aguas curativas que hacen sanar más rápido a los enfermos. Ese manantial se dice que es el que se encuentra a los pies de la Ermita de Nuestra Señora de la Asunción, conocido como fuente de Garón y cuya agua emana bajo la ermita. Un lugar rodeado de chopos y de un ambiente bucólico que hacen de este paraje, a tan sólo cinco kilómetros de Antigüedad, un centro de peregrinaje.
Monumentalidad local
Pero no todo en Antiquitate tiene su origen en leyendas y misterios, sino que diferentes hechos en la historia también han jugado un papel muy importante en el municipio para convertirlo en una localidad con una atracción especial para los turistas. De hecho, esos acontecimientos, que van desde el medievo hasta la Guerra Civil española, pasando por citas deportivas, se conmemoran a través de diferentes monumentos que se han ido colocando en distintos puntos de la villa, convirtiéndose en lugares de recreo.
El primero de ellos ocurrió en 1507, cuando la reina Juana de Castilla cruzaba estas tierras de camino a Granada con el cuerpo de su esposo, Felipe El Hermoso. Entonces, uno de los nobles que portaba el féretro se fracturó la muñeca, haciendo que la caja se abriera y el cuerpo cayera al suelo. Ante este hecho la monarca ordenó que se dejara constancia de aquél suceso y, en ese mismo lugar, se instaló una cruz de piedra que, desde entonces, se conoce como ‘La Cruz de la Muñeca’. Por este enclave pasa también una de las tres rutas turísticas más importantes de la villa, la de ‘la Fuente de los Serranos’, en la que se encuentran puntos tan curiosos como el Salegar –donde se depositaba sal para despertar el apetito del ganado- o típicas viviendas de pastores, muestra de la íntima relación que Antigüedad tenía con la mesta.
Cronológicamente, otro de los puntos de interés lo encontramos a las afueras del municipio, donde un avión de combate F-4 Phantom II, cedido por el Ejército del Aire, sirve de homenaje a los dos pilotos pioneros de la aviación militar española, César y Augusto Martín Campos –originales de Antigüedad-, quienes lucharon en la Guerra Civil española, cada uno en un bando, y que perecieron un año más tarde de que comenzara el conflicto. Dos hermanos que sirvieron de ejemplo para las siguientes generaciones de militares del aire antigüedeños.
El último de los monumentos relacionados con un hecho, esta vez deportivo, es la bicicleta que rememora la caída del americano Lance Armstrong en 2009 durante una etapa de la Vuelta a Castilla y León. El ciclista se fracturó la clavícula en este incidente y, a modo de recuerdo, en la carretera de Cevico-Navero, en lo alto de un poste, se ubica esta bicicleta que, a día de hoy, también sirve como homenaje a todos los aficionados a este deporte que pierden la vida cada año en las carreteras.
Misterios e historia envuelven Antigüedad. Realidad y leyenda entran en contraposición. Pero si algo está claro es que esta fusión entre ambas caras de la moneda le otorgan el verdadero encanto a la villa, haciendo que la visita a sus calles y alrededores se convierta en un periplo a caballo entre lo sobrenatural y la magia de la propia naturaleza; una incursión entre la historia real y la popular que, aunque se puede llevar a cabo en cualquier momento del año, el encanto del otoño la hacen aún más apetecible.